¿Qué ocurre cuando no hay estrategia? Que no tienes un plan de acción y, sin plan de acción, puede suceder de todo. El marketing digital es la hoja de ruta que te guía hacia la consecución de tus metas en tus canales online. Los objetivos son lo que quieres conseguir. Las estrategias, cómo los vas a alcanzar. ¿Quieres conseguir que tu marca sea única?

Estarás pensando: “es una tarea difícil, porque no se me ocurre cómo puedo alcanzar semejante reto”. Entonces, te pregunto: ¿qué te diferencia a ti del resto de los mortales? Tu respuesta puedes ser: “mi altura, el color de mis ojos, mi pelo, mi cuerpo, mi cara…”, o tal vez “mi personalidad, mis valores, mis creencias o mi filosofía de vida…”.

¿Sabes que tu marca tiene las mismas características? No te sorprendas. Como lo lees. Tu marca tiene personalidad, valores y una identidad visual única que la hace diferente a las demás. Y ahora te hago otra pregunta: ¿Cómo puedes definir todos estos aspectos? La respuesta para mí, es sencilla: con estrategias de marketing digital.

Tampoco he descubierto el agua caliente. Simplemente, hasta ahora las normas de consumo eran diferentes, pero de repente, la Pandemia aceleró el proceso, porque el comportamiento de tu consumidor ha cambiado y tienes que adaptarte.

Actúa o te quedas fuera de la partida

La digitalización ha puesto a prueba tu capacidad para incorporarte al nuevo sistema y si tu negocio no cumple con las reglas del juego, se quedará por fuera de la partida. Así de triste y doloroso.

De hecho, notas que cada vez te cuesta más alcanzar a tu público y no consigues vender. Esto te pasa porque no conectas con tu cliente ni destacas de tu competencia. De ti depende conseguir que tu marca sea única o que sea más de lo mismo.

Tu cliente tiene que elegirte porque cubres su necesidad como ninguna otra y encuentra en lo que le ofreces una experiencia única. Y ¿cómo lo consigues? Investigando para saber a quién le vendes y cómo le vas a vender.

«La soledad es estar rodeado de gente y pensar en quien te falta»

Debes indagar a conciencia, a quién le vendes. La persona que pagará por lo que le ofreces sin decir «mu». Se llama tu cliente ideal, porque mientras no lo definas, estarás como esa bonita frase que dice: «La soledad es estar rodeado de gente y pensar en quien te falta» de autor anónimo.  

Porque eso sí, no le vendes a todo el mundo. Cuando te diriges a todo el mundo es como si gritaras en medio de un estadio a una multitud a la que no le interesa nada de lo que le cuentas.

Cuando, por el contrario, consigues clasificar aquellas personas a las que sí les interesa lo que le ofreces puedes a la vez conocer sus preferencias y dirigirte a ellas con el mensaje adecuado y llegar a su corazón. Hoy no vendes productos y servicios, hoy vendes experiencias y sensaciones.

Si eres consciente de que necesitas marketing digital para tu marca, porque llegó la hora de darle un giro radical a tu gestión online, ponte en contacto conmigo y empezamos a trabajar. Me encantará acompañarte en este recorrido.